Una nueva habitación para un programa de VPO
El concurso simplemente proponía un solar donde desarrollar 20 VPO unifamiliares.
El estudio Espinosa+Moreno arquitectos propuso una ordenación que ensamblase el cumplimiento del programa de VPO con las necesidades reales de un lugar en el que la mayoría de sus habitantes subsisten de la agricultura. El cobertizo de aperos («shed» de Venturi) y la vivienda- dos categorías que parecen irreconciliables- se confunden en una unidad indisoluble.
La casa se desarrolla alrededor de un amplio espacio, libre y privado, al que vuelcan todas las estancias y con acceso posible desde el exterior a través de un almacén-garaje. El arquitecto deja la obra inacabada, el espacio donado a la VPO queda indefinido a la espera de que el habitante final disponga a través de su actuación de la apariencia final. Muros altos, enchufes, puntos de agua y un doble acceso permiten que pueda convertirse desde una zona de estancia con chimenea exterior, hasta un almacén de útiles, corral para animales o un patio ajardinado.