EL JARDÍN CERRADO
Exponer sobre un jardín, habitar un jardín.
La galería de escultura se concibe como un jardín cerrado al exterior por un muro que se habita. Un jardín contemplativo, abstraído del tráfico y del ruido; un lugar para pasear, observar; un lugar para estar un largo rato, donde gastar el tiempo.
Pocos materiales se utilizan para la definición de este espacio: un muro de hormigón perimetral que dobla en su coronación configurando una cubierta y paramentos de vidrio para delimitar los pabellones de exposición bajo la cubierta, la cafetería, el acceso y tienda. Las zonas pavimentadas exteriores se alfombran con adoquines de granito.
Arquitectura concebida para crear un jardín interior, aportando la textura de sus materiales. Desde este borde construido las especies vegetales dibujan un tejido dentro del cual se extienden esculturas en armonía con la orografía del terreno y con las exigencias expositivas de las piezas. A los árboles existentes se suman pequeñas láminas de agua y macizos de aromáticas: lavanda, romero, santolina, arrayán introducen color y perfume a la experiencia sensorial.
Exposición: proyecto expuesto en el COAM 2012